Siempre hay alguien que quiere acompañarte en tu camino, pero muchas veces nos detenemos un instante y creemos que lo mejor es aprender a caminar solos.
Hoy camino entre la gente sin un rumbo fijo, viendo caras alegres, enojadas, tristes o caras simples. Trato de no chocarme con ninguna, esquivo todo lo que pueda impedir que llegue más rápido a mi lugar sin nombre.
Al ver cambios en la gente mejoro en mi misma lo malo, camino rápido, lento o simplemente normal.
Si pasa un chico "lindo" trato de que me vea, quiero mostrarle al mundo que camina quien soy yo.
Muchas veces camino sola, es decir, en dirección contraria al resto de las personas. Caminar sola ya es costumbre. Me hace sentir un poco VIVA y veo al mundo de otra forma, de una manera mejor.
Todavía no sé a donde me dirijo... No marqué mi punto de llegada.
Siento que soy perfecta cuando empiezo a reírme sobre mis tropiezos, cuando creo haber encontrado ese camino y luego me doy cuenta que era una pequeña trampa de la vida.
Uno no cae en la tierra perfecto, uno se hace perfecto a lo largo de la vida, cuando descubrís el porque de todo.


